Definitivamente en Colombia estamos muy mal económicamente, en el 2002 el índice de pobreza en Colombia alcanzaba el 53.2%, una cifra escandalosa, sin embargo el gobierno de Álvaro Uribe basado en sus programas y devolviendo la confianza en la inversión, hizo que para el 2008 esta cifra bajara a los 46% una leve mejoría ante la magnitud de la situación de pobreza que hay en nuestro país, sin embargo las ganas a Uribe alcanzaron, Uribe tenía como meta bajarla al 35% para el 2010, pero fracaso en estos dos últimos años para alcanzar dicha meta, es que no es fácil en un país como Colombia el cual está lleno de personas corruptas y de tantos empresarios poco comprometidos con los menos favorecidos. La buena voluntad de un presidente no basta si no cuenta con el apoyo de los grandes capitales de un país como el nuestro y es que la realidad es que hay unos pocos que ganan cifras exorbitantes comparados con los millones de colombianos que hacen parte del 45.5% de pobres y del 16.4% de indigentes según estudios realizados en un trabajo científico que fue llevado a cabo por la Misión para el Empalme de las Series de Empleo, Pobreza y Desigualdad, Mesep, organismo integrado por Planeación Nacional, el DANE y expertos nacionales e internaciones, con el apoyo del Banco Mundial y de la Cepal.
Pero si sumamos estas dos cifras, porque el pobre y el indigente están casi en el mismo nivel, dado que un pobre es la persona que en el año 2009 a cambio de su trabajo recibió al mes menos de $281.384 mensuales y los indigentes son las personas que en 2009 recibieron mensualmente, por cabeza, menos de $120.588 por la labor que desarrollaron, vemos que en Colombia el 61.9% de los colombianos recibían a la fecha menos de $281.384. Y no paremos de contar porque de ahí para arriba en mi concepto la cifra de pobreza aumentaría, porque yo no creo que alguien que se gane un salario mínimo $515.000 se pueda considerar en otra categoría, para sobrevivir en Colombia se necesita mucho más de un salario mínimo. Pobre es aquel que no tenga el dinero suficiente para cubrir sus necesidades básicas (alimento, ropa, educación, vivienda y recreación), si hacemos cuentas sabremos que con un salario mínimo estas necesidades no se cubren, a menos de que varias personas en el hogar aporten, sin embargo esta condición no se cumple en muchos hogares colombianos.
Entonces si miramos en la realidad y no bajo los estudios mencionados anteriormente, la cifra resultante sería escalofriante, porque alrededor de 6.86%, aproximadamente 3.000.000 de colombianos actualmente reciben un salario mínimo, entonces tendríamos que sumados el 61.9% y el 6.86% tendríamos que en Colombia somos cerca de 44.000.000 de habitantes y de estos aproximadamente 30.100.000 de colombianos en estos momentos la están pasando muy mal para sobrevivir, eso sin contar las cifras intermedias entre pobres y aquellos que reciben un salario mínimo, pues es una cifra que desconozco pero debe ser bastante grande. Esas cifras son las que nos hacen sentir indignados con esta sociedad tan desigual, tan permisiva con unos pocos y tan injusta con la gran mayoría.
En Colombia necesitamos un presidente justo, equitativo, honesto y que baje la marcada diferencia social que corroe este hermoso país, pero para eso se necesita de un congreso limpio y honesto que permita al Ejecutivo llevar sus planes de desarrollo e inversión social a cabo sin tropiezos y sin intermediarios de favores que se roben nuestros recursos, sólo así la mayoría de los colombianos podrán salir de la inmunda miseria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario